La forma habitual de deshacerse de ciertos documentos escritos en físico o electrónicos, bien sea con carácter de obligatoriedad o porque ya no representen ninguna utilidad para el usuario, podría ser a través de una empresa de destrucción de documentos, la cual ofrece este servicio avalando cada actuación con un certificado que está subordinado a lo establecido en la Ley de Protección de Documentos, publicada en España en 1999.
Es probable, que el cliente al conocer los alcances sancionatorios de este reglamento, cuyo órgano encargado es la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) con amplia potestad en el Estado; se motive a mantenerse sumiso a tales exigencias. Así mismo, estas faltas están reconocidas como leves, graves y muy graves, cada una con un coste diferente.
En cuanto al traslado de estos elementos, generalmente, los mismos son llevados en equipos especiales al lugar donde serán destrozados, verificando estrictamente todas reglas de manipulación. Incluso, si el solicitante desea presenciar el acto, también es permitido. De manera, que quede completamente satisfecho en sus deseos.
La Certificación legal
Quizás, uno de los aspectos fundamentales es la entrega del documento donde se especifica detalladamente la cantidad, tanto en físico como digital, de todo aquello calificado como inservible y, por ende, eliminado. Sin embargo, también están inmersas en el procedimiento ciertas características para que la actividad se ejecute de un modo impecable; entre estos se pueden mencionar la privacidad y los acuerdos mutuos.
De lo antes expuesto, se deduce que esos eventos regularmente se practican en escenarios en donde solo los involucrados directos serían los espectadores, evitando la posible fuga de información. Ahora bien, en referencia al pacto hecho entre las partes, se puede agregar que, logrados los convenios impuestos por ambos, se firme y se proceda a ejecutar el plan.
Ya para finalizar, considerando la gama de empresas dedicadas a esta labor, comúnmente reconocidas y controladas por un ente superior, con toda la idoneidad para cumplir cada obligación satisfactoriamente, se sugiere buscar las caracterizadas por una intachable trayectoria en el mercado. Obteniendo simultáneamente, el beneficio deseado y acatando el ordenamiento jurídico preestablecido.